miércoles, 24 de octubre de 2012

Hoy tengo la necesidad de sentirme una personalibro.

En  medio del revuelo que impregna la ciudad cada mañana me detengo y recuerdo aquellas horas en las que los minutos volaban, la razón hablaba, la vida nos miraba diferente... o eso pensábamos.

miércoles, 25 de abril de 2012

BIENVENIDAS

Hoy me decido por este poema titulado ¿Qué les queda a los jóvenes? (de Benedetti), dedicado a todas las personas-libro y a todas aquellas involucradas en el proyecto La voz a ti debida. En el mundo de ''rutina y ruina'' que vivimos cada día me pregunto más  que nos queda por hacer a las personas jóvenes para demostrar que valemos la pena, que no solo pensamos en ''cocaína, cervezas, barras bravas, discotecas...'' sino que  solo necesitamos que apuesten por nosotras y nos den un pequeño empujón como cada día hacen algunos.



¿Qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de paciencia y asco?
¿sólo grafitti? ¿rock? ¿escepticismo?
también les queda no decir amén
no dejar que les maten el amor
recuperar el habla y la utopía
ser jóvenes sin prisa y con memoria
situarse en una historia que es la suya
no convertirse en viejos prematuros

¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de rutina y ruina?
¿cocaína? ¿cerveza? ¿barras bravas?
les queda respirar / abrir los ojos
descubrir las raíces del horror
inventar paz así sea a ponchazos
entenderse con la naturaleza
y con la lluvia y los relámpagos
y con el sentimiento y con la muerte
esa loca de atar y desatar

¿qué les queda por probar a los jóvenes
en este mundo de consumo y humo?
¿vértigo? ¿asaltos? ¿discotecas?
también les queda discutir con dios
tanto si existe como si no existe
tender manos que ayudan / abrir puertas
entre el corazón propio y el ajeno /
sobre todo les queda hacer futuro
a pesar de los ruines de pasado
y los sabios granujas del presente.

viernes, 9 de marzo de 2012

AUSENCIA DE DIOS

Dado que gozamos de este miniespacio cultural y tenemos total libertad de expresión no me he podido resistir más a publicar este gran poema de Benedetti.

Digamos que te alejas definitivamente
hacia el pozo de olvido que prefieres,
pero la mejor parte de tu espacio,
en realidad la única constante de tu espacio,
quedará para siempre en mí, doliente,
persuadida, frustrada, silenciosa,
quedará en mí tu corazón inerte y sustancial,
tu corazón de una promesa única
en mí que estoy enteramente solo
sobreviviéndote.
Después de ese dolor redondo y eficaz,
pacientemente agrio, de invencible ternura,
ya no importa que use tu insoportable ausencia
ni que me atreva a preguntar si cabes
como siempre en una palabra.
Lo cierto es que ahora ya no estás en mi noche
desgarradoramente idéntica a las otras
que repetí buscándote, rodeándote.
Hay solamente un eco irremediable
de mi voz como niño, esa que no sabía.
Ahora que miedo inútil, qué vergüenza
no tener oración para morder,
no tener fe para clavar las uñas,
no tener nada más que la noche,
saber que Dios se muere, se resbala,
que Dios retrocede con los brazos cerrados,
con los labios cerrados, con la niebla,
como un campanario atrozmente en ruinas
que desandara siglos de ceniza.
Es tarde. Sin embargo yo daría
todos los juramentos y las lluvias,
las paredes con insultos y mimos,
las ventanas de invierno, el mar a veces,
por no tener tu corazón en mí,
tu corazón inevitable y doloroso
en mí que estoy enteramente solo
sobreviviéndote. 

jueves, 8 de marzo de 2012

YO TAMBIÉN LEO LAS COSAS DE ELLAS...

En conmemoración al día de la mujer trabajadora, vamos a compartir algunos de sus poemas. Yo apuesto por Rosalía de Castro con ''Ansia que ardiente crece''.

Ansia que ardiente crece,
vertiginoso vuelo
tras de algo que nos llama
con murmurar incierto,
sorpresas celestiales,
dichas que nos asombran;
así cuando buscamos lo escondido,
así comienzan del amor las horas.

Inaplacable angustia,
hondo dolor del alma,
recuerdo que no muere,
deseo que no acaba,
vigilia de la noche,
torpe sueño del día
es lo que queda del placer gustado,
es el fruto podrido de la vida.

sábado, 18 de febrero de 2012

La voz a ti debida (versos 1237 a 1265) de Salinas.

Lo que eres
me distrae de lo que dices.
Lanzas palabras veloces,
empavesadas de risas,
invitándome
a ir adonde ellas me lleven.
No te atiendo, no las sigo:
estoy mirando
los labios donde nacieron.
Miras de pronto a los lejos.
Clavas la mirada allí,
no sé en qué, y se te dispara
a buscarlo ya tu alma
afilada, de saeta.
Yo no miro adonde miras:
yo te estoy viendo mirar.
Y cuando deseas algo
no pienso en lo que tú quieres,
ni lo envidio: es lo de menos.
Lo quieres hoy, lo deseas;
mañana lo olvidarás
por una querencia nueva.
No. Te espero más allá
de los fines y los términos.
En lo que no ha de pasar
me quedo, en el puro acto
de tu deseo, queriéndote.
Y no quiero ya otra cosa
más que verte a ti querer.

domingo, 27 de noviembre de 2011

Es un fragmento de uno de los diálogos de ''Bodas de sangre'' que refleja la fuerza del verdadero amor.

- El orgullo no te servirá de nada.

-No te acerques.

-Callar y quemarse es el castigo más grande que nos podemos echar encima. ¿De qué me sirvió a mí el orgullo y el no mirarte y dejarte despierta noches y noches? ¡De nada! ¡Sirvió para echarme fuego encima! Porque tú crees que el tiempo cura y que las paredes tapan, y no es verdad, no es verdad. ¡Cuando las cosas llegan a los centros no hay quien las arranque!

-No puedo oírte. No puedo oír tu voz. Es como si me bebiera una botella de anís y me durmiera en una colcha de rosas. Y me arrastra, y sé que me ahogo, pero voy detrás. Y sé que estoy loca y sé que tengo el pecho podrido de aguantar, y aquí estoy quieta por oírte.

martes, 15 de noviembre de 2011

Romeo y Julieta.

¿Y qué hay ahora de ese al que tanto amabas? ¿Ya lo olvidaste? El amor de los jóvenes no habita el corazón sino los ojos. ¡Cuántas lágrimas por él, y cómo lavaron tus claras mejillas!¡Cuánta agua salada vertida inútilmente por un amor que ya no sabe a nada! ¿Por qué el amor parece tan dulce en apariencia y si se prueba tan tirana y cruel?. Y sí, ella posee la riqueza de lo bello pero es pobre porque todo cuanto tiene con ella debe morir. Pues porque para el amor no hay límites de piedra y lo que el amor puede lo debe de intentar el amor. Si alguna vez fuiste tú mismo, si los suspiros eran tuyos, tú y tus suspiros eran para los ángeles y ahora, has cambiado.