martes, 15 de noviembre de 2011

Romeo y Julieta.

¿Y qué hay ahora de ese al que tanto amabas? ¿Ya lo olvidaste? El amor de los jóvenes no habita el corazón sino los ojos. ¡Cuántas lágrimas por él, y cómo lavaron tus claras mejillas!¡Cuánta agua salada vertida inútilmente por un amor que ya no sabe a nada! ¿Por qué el amor parece tan dulce en apariencia y si se prueba tan tirana y cruel?. Y sí, ella posee la riqueza de lo bello pero es pobre porque todo cuanto tiene con ella debe morir. Pues porque para el amor no hay límites de piedra y lo que el amor puede lo debe de intentar el amor. Si alguna vez fuiste tú mismo, si los suspiros eran tuyos, tú y tus suspiros eran para los ángeles y ahora, has cambiado.

1 comentario:

  1. Bienvenida María:

    aquí tienes tu espacio para decir, con palabras de otros, lo que tú quieras. Utilízalo y entiéndelo así: como un modo de crecer personalmente. Es la única manera de darle sentido y aprovechar esta ventana al mundo.

    (Ya te explico como agregar a los demás miembros).

    ResponderEliminar